Blog literario idiota de Andrés Nortes Martínez-Artero. Literatura y rock en vena. Y alguna cosa más

miércoles, 28 de septiembre de 2011

Barrabás y los libros prestados, de Arturo Uslar Pietri, mi padre y mis amigos

Hoy en disertaciones a sordas hablaremos sobre el tema "Libros regalados".



(Jeje... ¡Este es Uslar Pietri en su despacho, no soy yo!)



Me gusta, cuando empiezo a escribir estas palabras en internet, hacer una pequeña reflexión al hilo del maravilloso acto de leer. Es tan complejo y tan variado que siempre puede suceder algo nuevo y siempre puede dar juego para charlar un poco sobre estos asuntos para-literarios que no son la literatura en sí, pero tienen que ver con ella.

Es el caso de -como imitaba al comienzo- los libros regalados y, por qué no, también los libros prestados y los regalados. Cada año, sin ir más lejos, a final de año, mi padre suele regalar a cada miembro de la familia un libro. Sus consejeros para la elección del regalo han sido muy variados: revistas de libros, internet, bibliotecas particulares donde la frecuencia indicaba el aprecio por un escritor u otro, las recomendaciones de Diego Marín, etc. (Diego Marín es el gran librero de Murcia, mi ciudad).

Estos regalos a veces gustan y a veces no, como es obvio. Nunca disgustan del todo, porque cualquier libro puede tener su momento (y/o su lector) adecuado pero en ocasiones se producen curiosas distorsiones del uno y su intimidad en el camino del otro. Por ejemplo: Umberto Eco novelista en lugar de Umberto Eco ensayista; recibir dos veces El sueño del celta y que la versión con facsímil sea la única de la que se conserva tique de compra o que al día siguiente se produzcan "cambios" en los participantes de un regalo masivo.

Unas fiestas me regalaron por mi cumpleaños unos Cuentos completos de Arturo Uslar Pietri, en la edición de Gustavo Guerrero de la editorial Páginas de espuma. Durante muchos años miré esa portada amarilla con la mirada melancólica y perdida del venezolano y creí que se trataba de la mirada interior de mi padre esperando que le comentara algo sobre ese regalo. Arturo Uslar Pietri había danzado por casa en las ediciones de RTVE y de Cátedra. Concretamente recuerdo que lo compré en Cátedra, que lo empecé, que lo olvidé en casa al marchar a la playa un fin de semana y que lo acabé en esas páginas duras y mal impresas, con tinta corrida, de los años setenta. Recuerdo cómo me aterraban las descripciones de lugares y de personas, los rasgos sobresalientes de los personajes que monopolizaban las descripciones, los destinos paralelos a veces, a veces cruzados, siempre inciertos de sus personajes. Las lanzas coloradas era una novela que a día de hoy me niego a leer porque a lo mejor aquella fantástica impresión que me causó tal vez se aplanaría con el peso de los conocimientos y de la costra experiencial que causan los años.

Estos días, entre Murcia y Antequera, he leído el primer libro que integra los Cuentos completos de Uslar Pietri, para ir pagando mis deudas con mis regaladores.Se llama Barrabás y otros relatos, y está escrito en 1928. Es una colección de 16 cuentos en unas 77 páginas. Cuentos breves, por tanto, si bien el formato de la publicación es de páginas un poco más grandes de lo habitual.

Peronalmente no he encontrado un nexo entre los cuentos salvo el estilo, del que luego hablaré, así es que voy a decir unas palabrillas sobre aquellos que más me han gustado.

"Barrabás" es un buen cuento. Lo que pasa es que recuerdo muy fuertemente el Barrabás de Pär Lagertvisk, que leí cuando era niño y que me impresionó fuertemente. Me han llamado la atención sus descripciones iniciales.


"S. S. San Juan de Dios" me ha gustado también bastante. Es un hermoso relato de personaje, que no de acción. En pocas páginas consigue captar con fuerza la personalidad del capitán del barco.

"Apólogo del buen vino" es un cuento modernista sin más. No tiene mucho interés, la verdad.

"La caja" podría haberlo escrito Poe. Bastante bien. Y también es marinero.

"El camino" es un cuento simbólico, igual que "Ahora y en la hora de la muerte", aunque tengan algunas diferencias. Los dos son cuentos interesantes. En realidad, Uslar Pietri tiene una capacidad extraordinaria de aprovechar literariamente la desgracia de los miserables. No sé hasta qué punto haya empatía y hasta qué punto sea explotación, la verdad, puesto que la retórica es bastante densa y no alcanzo a ver un discurso político en sus cuentos. "Ahora y en la hora de la muerte" tiene la virtud de tener un tema y un planteamiento siniestramente abiertos, con lo cual se convierte en un cuento muy actual (y muy desasosegante).

"El idiota" y "Miralejos" son cuentos más costumbristas, más al tipo Rómulo Gallegos o si acaso parecidos a Ricardo Güiraldes.

El estilo unifica todos los cuentos. El uso del castellano es muy poético, cambiando en ocasiones incluso los usos morfológicos de los verbos. Se podría decir que en sus cuentos Uslar Pietri está equidistante de la retórica típica del modernismo (por ejemplo, en "Zumurrud") y de la angustiada vanguardia expresionista. En ocasiones parece artificial; en otras ocasiones, un solo (y barroco) adjetivo vale por una página de descripciones.

Este primer libro de cuentos del escritor venezolano quizá no sea para todos los públicos. A alguien que no obtenga placer de las palabras por las palabras y que necesite historias chocantes puede no decirle nada. No es, desde luego, el mejor cuentista que yo haya leído, ni el mejor libro de cuentos con el que me haya topado, pero un interés sí tiene. Mi amigo Juan Antonio dice que tras largas y densas lecturas hay que regalarse con cuentos para recuperar. Le he hecho caso. Y supongo que antes o después leeré el siguiente libro de cuentos de la colección. Así seguiré devolviendo el regalo a mi padre.



PS. Otro día hablaremos de los libros prestados. Esos sí que dan para un mundo...